sábado, febrero 24, 2007

Fuegos Fatuos, el “misterio” de las luces

Una leyenda popular rusa describe los fuegos fatuos como el espíritu de niños que han nacido muertos revoloteando entre el cielo y el infierno. En varios países americanos se habla de las "almas en pena" y el folclore inglés los personifica como diablillos o duendes que atraen a sus víctimas hacia el peligro de los pantanos.

La verdad de estas misteriosas luces es que además de ser un fenómeno químico son en parte también un fenómeno cultural (mas que un misterio), ya que según la región donde se presenten, se les viene atribuyendo diversos motivos o nombres, desde espíritus de niños, hasta diablillos malvados. Es la cultura universal de nosotros, los seres humanos atribuimos un significado fantástico a aquellos fenómenos que desconocemos o que no alcanzamos a comprender. En la antigüedad, los fenómenos naturales como la lluvia, las tormentas eléctricas, y el fuego eran considerados producto del demonio o de una que otra divinidad enfadada.
Lo cierto es que en terrenos con excesiva maleza y mucha humedad ambiental, tales como pantanos, ciénagas y selvas, es muy común que se vea lo que parece aparentemente lumbre o fuego en lugares determinados del terreno. ¿Fantasmas, duendes o espíritus? Estas son las interpretaciones mas comunes que establece la gente que no esta informada y que tiene la oportunidad de observarlos.

Estos fuegos que asemejan ser luces, son en realidad producidos por escapes de un gas llamado metano, que se escapa del suelo al ambiente, este hace una reacción química llamada combustión que reacciona al contacto con el aire (Co2). Esta combustión solo se dará si las condiciones de concentración, temperatura y humedad ambiental (H2O) lo permiten.

Este gas metano se produce por la descomposición de materia orgánica, como plantas, excrementos y animales muertos a poca profundidad bajo la tierra húmeda. Aquí el gas metano es resultado del proceso que producen las bacterias al alimentarse de la descomposición.
Entonces el metano generado por descomposición, normalmente se escapa a la atmósfera de forma gradual, diluyéndose y perdiéndose. Sin embargo, bajo una capa de tierra húmeda el gas puede quedar atrapado, concentrándose continuamente. Donde al final el gas acumulado encuentra una vía de escape hacia la superficie.

Por lo general estos escapes de gas se diluyen sin problema en el ambiente, pero si la atmósfera está relativamente en calma pueden permanecer un rato sobre la tierra. En ocasiones, al mezclarse el gas con el oxígeno se produce la flama, dando lugar a esas luces misteriosas donde la mayoría de estas son azuladas, pero depende de la composición de sustancias que formen al gas y de su concentración. La flama, como resultado de la combustión puede adquirir tonos amarillentos, rojizos o verdosos. Este tipo de flamas, en general, suelen operar a muy baja temperatura, por lo que es posible que no logre quemar las hierbas que se encuentran alrededor.

Es frecuente que los fuegos fatuos se den en cementerios por los gases producidos por los cadáveres. Aunque también puede darse en terrenos secos, en los que la lluvia haya creado una franja subterránea de tierra húmeda. No tiene nada de misterioso, y no son peligrosos.
Como es un gas muy tenue el menor movimiento de aire puede agitar la llama, esta se moverá e incluso puede haber una reacción en cadena y que encienda otros escapes de gas semejantes en las cercanías. De hecho, si una persona se halla cerca de un fuego fatuo y se aleja de él, la corriente de aire resultante de su movimiento puede arrastrar la llama en su persecución.
Generalmente las personas que son espectadoras de este fenómeno son personas mal informadas que atribuyen la causa de estas flamas, a espíritus, seres feéricos o demonios. Y es lógico comprender esta conducta en ellas, ya que a cualquier fenómeno natural que no se comprende, se le atribuye un significado fantástico.

Lic. Carlos E. Pacheco S. / Director General Grupo ZETTA / galfordp@hotmail.com

1 comentario:

Caballerodecopas dijo...

No creo, pues en mi caso particular es imposible que se trate de nada "enterrado" en el piso. ¿Como? Si vivo en quinto piso? Es imposible que haya nada enterrado debajo de mi o sino mi piso sería fofo y me caería, es imposible! XD De todos modos investigaré de que se trata, pues ya llevan 6 años apareciendo y desapareciendo en el techo de una habitación y realmente me dan mucho miedo.